jueves, 3 de mayo de 2007

4to caso: "Domingueros"

No hay bicho más insoportable que el "Dominguero". ¡Ese sí que tiene frío en el pecho!

El "Dominguero" es aquél conductor que entorpese el tránsito debido a la escasa velocidad con la que maneja. Es cierto que los Domingos uno suele conducir más lento, disfrutando del paisaje, y generalmente, tiene poco apuro para llegar a destino. En otras palabras, es un buen día para ir a dar un paseo en coche.

El "Dominguero" pasea entre semana. No le importa si el resto de los conductores desean pasarlo, el tipo sigue manejando a 40km, por el medio de la calle y lo peor de todo, no hay forma de hacerle entender su condición.

Bicho de ciudad. Uno se lo puede encontrar en cualquier sitio. En 18 de Julio, a las 7:30 de la tarde en plena salida de los trabajadores, estancando a autos, taxis, bondis, motos... Si uno escucha barullo, un puterío enorme, bocinas cornetas y afines, no se trata de los radicaloides que queman banderitas de Estados Unidos, seguramente haya un "Dominguero" en la vuelta.

"¡Apurá esa chatarra Dominguero!", "¡Dale viejo alcahuete!" y todas sus variantes.

Este humilde blog propone el siguiente alarido a sus lectores, a ser estrenado la próxima vez que se encuentren con este tipo de personajes.

"¡Viejo Dominguero! ¡¿Por qué no te comprás una polera... Pechofrío?!"

Como vemos, es importante tomar aire donde se encuentran los puntos suspensivos. Si gritamos todo seguido, seguramente lleguemos al final de la frase con poco aire, es por eso que recomendamos detenernos luego de "polera", cosa de arremeter con el "Pechofrío", que es un concepto vital para nuestro ladrido. Es muy importante la respiración. Ah sí...

Otra recomendación: ¿Por qué no agregar otra frase hiriente al asunto?

Por ejemplo, agreguemos "Sí, sí, a vos te hablo gallina" o "¡¿Qué mirás para otro lado, no te das cuenta que no tenés aguante?! "

Veamos:

1- ¡Viejo Dominguero! Sí, sí, a vos te hablo. ¡¿Por qué no te comprás una polera... Pechofrío?!

2- ¡Viejo Dominguero! ¡¿Qué mirás para otro lado, no te das cuenta que no tenés aguante! ¡Por qué no te comprás una polera... Pechofrío!

Un lujito eh?

Bueno, me despido. Muchas gracias por seguir estando, gracias por no usar poleras y hasta la próxima.

2 comentarios:

Matilde dijo...

Yo solía ser dominguera.
Hasta que le choqué el auto a mi padre y no me lo volvió a prestar (no teman por mi vida, fue un impacto sin importancia).
Luego comprendí que esa forma de manejar vuelve insoportable el tránsito, pero no tiene que ver con que sea mujer.
En fin, lo que quería decir es que me encantó cómo nos estás enseñando esta cultura de criticar y avergonzar en público al pechofrío... Parecía una receta de cocina en un programa de televisión, pero con mejores resultados campeón!

F. O´neil dijo...

Excelentes insultos para los malditos domingueros! Aguanten las poleras para los pechofríos